Salmo 058
Introducción. - Este poema es un severo reproche contra los jueces inicuos, que con sus decisiones arbitrarias fomentan la violencia y la injusticia en la sociedad. Después de una invectiva llena de sarcasmo (vs. 2-3), el Salmo describe la inconducta de los jueces y su obstinación en el mal (vs. 4-6), y lanza contra ellos enérgicas imprecaciones (vs. 7-10). Por último, anuncia la alegría que experimentarán los justos cuando se manifieste la justicia de Dios (vs. 11-12).
Este salmo de terminología tan enérgica constituye un llamado contra la corrupción de los jueces y en favor de la limpieza del sistema judicial en Israel. Se llama imprecatorio. Es una súplica tan intensa por justicia que parece, a primera vista, una llamada de venganza.
1 Del maestro de coro. “No destruyas”. De David. Mictán.
2 ¿Acaso ustedes, los poderosos,
pronuncian realmente sentencias justas
y gobiernan a los hombres con rectitud?
3 ¡No! Ustedes cometen injusticias
a plena conciencia
y favorecen la opresión en la tierra.
El Antiguo Testamento está lleno de referencias acerca de la justicia y es un tema clave en los salmos. Es lamentable, pero muchos jueces y gobernantes en épocas antiguas tomaron la justicia en sus propias manos. Tenían completa autoridad sin responsabilidad alguna y poder para hacer sus leyes. Cuando los jueces terrenales son corruptos, hay muy poca esperanza de justicia en esta vida. Pero Dios ama la justicia y los que lo obedecen verán la justicia perfecta en la eternidad.
Estamos rodeados de injusticias diarias, de momentos en los que los malos parece que ganen, en que aquellos que no actúan bien salen beneficiados, en que los que roban salen impunes y continúan haciéndolo y en muchas ocasiones esto crea desconfianza en nosotros. Pero podemos estar tranquilos, porque a los jueces humanos se les puede ocultar información, pueden ser mentidos desde un estrado, pero al Juez de toda la tierra no se le puede engañar, no se puede jugar con Él. Él conoce todo lo que ocurre, el conoce al inocente y al culpable, al justo y al injusto.
Al referirse a quienes considera corruptos el salmista los muestra tal cual son y presenta tres ejemplos del alcance de su maldad:
1. Su Mentira: La falsedad de los jueces corruptos se hace patente en el hecho de que desde su nacimiento practican la mentira. “Se descarriaron hablando mentira desde que nacieron”
2. Su Motivación: La mala intención o mala voluntad se describe como “veneno”. Como la capacidad para generar un veneno es innato en la serpiente y no puede menos que hacer daño porque es parte de su naturaleza, así los mentirosos dañan como expresión natural de su corrupción.
3. Su Mente: “Son como el áspid que cierra su oído, que no oye la voz de los que encantan”. Los corruptos acallan la voz de su conciencia y no hacen caso a las sanas advertencias
4 Los impíos están extraviados
desde el seno materno;
desde su nacimiento se descarriaron los impostores.
5 Tienen un veneno semejante al de las víboras;
son como una serpiente sorda, que cierra los oídos,
6 para no oír la voz del encantador,
la voz del mago que ejerce su arte con destreza.
Los impíos se caracterizan por mentira y veneno, lo que es dañino; pero son sordos a Dios y a los hombres. Se comparan con serpientes sordas que no responden a los encantadores, aunque ahora se reconoce que los encantadores influyen sobre las serpientes por el ritmo de su movimiento y no por el sonido de su flauta.
7 Rómpeles, Dios mío, los dientes en la boca;
arráncales, Señor, esos colmillos de leones.
8 Que se diluyan como agua que se evapora;
que se marchiten como hierba pisoteada.
9 Sean como una babosa que se deshace al pasar,
como un aborto de mujer que no llegó a ver el sol.
10 Que los arrastre el vendaval –verdes o quemados–
antes que produzcan espinas como una zarza.
Toda persona que existe en esta tierra tiene una necesidad imperiosa de justicia, y responde de una manera abrupta y rechaza abiertamente las injusticias que los hombres cometen. Casos como los de las niñas Marta del Castillo o Mari Luz Cortés conmovieron el corazón de todo un país, produjeron manifestaciones en diferentes puntos y por diferentes personas, el clamor por justicia para esas niñas invadió los corazones de los españoles. La justicia es una necesidad que Dios ha puesto en el hombre, porque Dios es justo y ama la justicia.
El salmista eleva su oración para que los corruptos:
1. Sean incapacitados para hacer el mal: Dice “quiebra sus dientes”, con la intención de que no puedan devorar a otros como lo hicieron con él.
2. Sean interrumpidos sus planes: “Sean disipados como aguas que corren: cuando disparen sus saetas, sean hechas pedazos”. No pide que sus flechas vuelvan contra ellos sino que no alcancen su objetivo.
3. Sean inútiles sus afanes y negocios: “Pasen ellos como el caracol que se deslíe”. Menciona este ejemplo por causa de la creencia popular de que el rastro que deja el caracol es la disolución de su propia sustancia.
11 El justo se alegrará al contemplar la Venganza
y lavará sus pies en la sangre de los impíos.
12 Entonces dirán los hombres:
“Sí, el justo recibe su recompensa;
sí, hay un Dios que hace justicia en la tierra”.
Entre todas las personas, nuestros líderes nacionales deben ser justos y rectos. Cuando son injustos y corruptos, el pueblo sufre. Los ricos se enriquecen, los pobres se empobrecen más, los políticos arrebatan con violencia el poder de la gente, la nación se deteriora moralmente y se olvida a Dios. Cuando al fin el bien triunfa, «se alegrará el justo». Tenga la seguridad de que habrá un día en que se rendirán cuentas y Dios juzgará con justicia. Cuídese para que nunca esté del lado de la injusticia, no sea que se encuentre parado ante un juez molesto.